Por fin ha llegado el día de dormir
más tranquila. Hoy he tenido los temibles exámenes, y estoy muy
contenta (como mucho solo voy a recuperación de uno).
Este fin de semana es la fiesta mayor
de mi pueblo y como hoy tenia día completito decidí no salir vaya a
ser que me pasase como el año paso, que no pude levantarme de la
cama de la borrachera que pillé. Esta noche si que voy a salir y
como dice una amiga mía mañana nos cantarán: “No estaba muerto
que estaba de parranda” (una larga historia... con este vídeo se
resume todo).
Hoy en la universidad, mientras cruzaba
la plaza que hay en el campus he escuchado como me llamaban a gritos.
He reconocido la voz a la primera pero me he hecho la sueca, he
escuchado pasos muy acelerados detrás de mi y ya no me ha quedado
mas remedio que girarme. Era una mujer muy pesada que trabaja en el
mismo sitio que yo pero diferente población, no hay semana que no
reciba una llamada mía o de mi compañera para decirle que lo está
haciendo mal. Pero le da igual todo: que recibe una llamada dándole
una colleja, pues ella se lo pasa por el forrete; que vas a su
oficina para explicarle como se tienen que hacer las cosas, pues ella
se lo pasa por el forrete. Pero luego cuando ella necesita ayuda
“vital” suelen ser chumimierdas tu tienes que estar atendiendo su
llamada o lo que sea. Pues hoy aprovechando que estaba fuera de mi
horario laboral y viendo lo escandalosa que es (en un estado sobrio
normal ami no se me pasa por la cabeza llamar a la gente a gritos),
he aprovechado para no poner dientes dientes y decirle mientras que
le daba una palmadita en la espalda: Muy bien “señora X” tomo
nota para otra vez.
Y me he ido.
Seguro que se ha quedado pilladisima y
no lo ha entendido muy bien, pero aveces soy así de brusca.
Otro día escribiré una entrada sobre
las cosas que me da mucha rabia.
Ahora me voy de fiesta mayor MUAK!!!!